En alguna otra actividad, reflexionamos sobre los riesgos que corre la Generación NET, así como algunas formas en que nosotros, los educadores, podríamos acompañarlos en algunos momentos de sus vidas para ayudar a evitarles riesgos.
Esto es muy importante, pues nosotros vivimos el día con día con adolescentes de esta generación, y vemos algunas conductas que pueden ser de vital importancia abordarlos para evitar riesgos posteriores.
La reflexión fue la siguiente:
Lista de riesgos que la Generación Net puede correr:
- la pornografía. Antes, la pornografía era algo prohibido e, incluso, difícil de conseguir. Hoy en día se encuentra a un sólo click y ya no se ve como algo tan grave. Los adolescentes de hoy están expuestos a ser adictos y a las graves consecuencias de ella.
- empleo desmedido del internet. Este uso del internet no es para cosas positivas normalmente, sino simplemente para pasar el tiempo. Lo grave es dejar de hacer cosas positivas, como socializar, hacer ejercicio, tareas, tiempo de amigos, etc.
- horas de sueño. Un adolescente puede desvelarse todas la noches sin siquiera pensar que está haciendo mal. Su cuerpo lo reciente y deja de rendir lo que haría con un cuerpo sano y descansado.
- propensos a trastornos mentales. La primera causa es la falta de descanso real. Surge estrés, ansiedad, depresión, fobias, etc. Sin embargo, hay otras causas, como la falta de educación y cuidados en casa, la poca tolerancia a la frustración, etc.
- falta de criterio. No hay quien les guíe en el uso de las tecnologías. Los adultos somos migrantes y vamos pasos atrás de ellos. Aunque sepamos más de lo que puede estar bien o mal, al no conocer dónde se mueven ellos, no alcanzamos a dar reglas de comportamiento.
- falta de respeto a la intimidad. Existe la idea de que en las redes sociales se puede postear todo, por lo que ellos usan imágenes que no los dejan siempre bien parados. De igual manera, abren las puertas de su casa y de su cuerpo a desconocidos, con los riesgos que esto implica.
- relaciones personales superficiales. Al darle más importancia a las relaciones vía digital, les cuesta trabajo relacionarse cara a cara con los demás. Esto los hace tener prácticamente dos personalidades.
- pensar que todo es desechable. Hoy no se entiende que las cosas se pueden usar hasta que se acaben, que las cosas se pueden arreglar para darles más vida útil. Esas ideas han permeado todo, incluso sus relaciones personales. Por eso la gente cree hoy que se pueden casar y "sino funciona, ni modo".
- desinterés. Piensan que el mundo de adultos no es el suyo y se muestan totalmente desinteresados de él. Hoy vemos que no les importa los esfuerzos por salvar a una especie animal, de mejorar nuestro entorno natural, de corregir el rumbo de un país.
- soledad. La tecnología aleja al individuo de los demás. La primera célula afectada es la familia. Vemos hoy familias comiendo juntos pero cada uno mentalmente en otro lugar. Esto evita la transmisión cultural y de ideas morales y éticas e dañan a la sociedad.
¿Cómo podemos nosotros ayudar a disminuir los riesgos que corren?
La respuesta es tan simple de verbalizar como compleja de llevar a cabo. Necesitamos caminar con ellos, guiarlos, platicar, enseñar, trabajar a su lado. No se trata de adjetivizar lo que hacen y lo que hicimos nosotros y sabemos, sino de darles puntos de comparación y de orientación. Es complejo porque implica un enorme esfuerzo de nuestra parte, de prepararnos conociendo más de la tecnología, de ellos, de los seres humanos. Se trata de que rompamos con los esquemas tradicionales de creer que los adultos no necesitan prepararse para comunicarse con los más jóvenes. Se trata de ayudarlos a sentirse cómodos para que nos escuchen, para que se sientan escuchados y así lograr vencer las diferencias naturales entre generaciones.
Esta reflexión fue 100% basada en experiencia personal.
Esto es muy importante, pues nosotros vivimos el día con día con adolescentes de esta generación, y vemos algunas conductas que pueden ser de vital importancia abordarlos para evitar riesgos posteriores.
La reflexión fue la siguiente:
Lista de riesgos que la Generación Net puede correr:
- la pornografía. Antes, la pornografía era algo prohibido e, incluso, difícil de conseguir. Hoy en día se encuentra a un sólo click y ya no se ve como algo tan grave. Los adolescentes de hoy están expuestos a ser adictos y a las graves consecuencias de ella.
- empleo desmedido del internet. Este uso del internet no es para cosas positivas normalmente, sino simplemente para pasar el tiempo. Lo grave es dejar de hacer cosas positivas, como socializar, hacer ejercicio, tareas, tiempo de amigos, etc.
- horas de sueño. Un adolescente puede desvelarse todas la noches sin siquiera pensar que está haciendo mal. Su cuerpo lo reciente y deja de rendir lo que haría con un cuerpo sano y descansado.
- propensos a trastornos mentales. La primera causa es la falta de descanso real. Surge estrés, ansiedad, depresión, fobias, etc. Sin embargo, hay otras causas, como la falta de educación y cuidados en casa, la poca tolerancia a la frustración, etc.
- falta de criterio. No hay quien les guíe en el uso de las tecnologías. Los adultos somos migrantes y vamos pasos atrás de ellos. Aunque sepamos más de lo que puede estar bien o mal, al no conocer dónde se mueven ellos, no alcanzamos a dar reglas de comportamiento.
- falta de respeto a la intimidad. Existe la idea de que en las redes sociales se puede postear todo, por lo que ellos usan imágenes que no los dejan siempre bien parados. De igual manera, abren las puertas de su casa y de su cuerpo a desconocidos, con los riesgos que esto implica.
- relaciones personales superficiales. Al darle más importancia a las relaciones vía digital, les cuesta trabajo relacionarse cara a cara con los demás. Esto los hace tener prácticamente dos personalidades.
- pensar que todo es desechable. Hoy no se entiende que las cosas se pueden usar hasta que se acaben, que las cosas se pueden arreglar para darles más vida útil. Esas ideas han permeado todo, incluso sus relaciones personales. Por eso la gente cree hoy que se pueden casar y "sino funciona, ni modo".
- desinterés. Piensan que el mundo de adultos no es el suyo y se muestan totalmente desinteresados de él. Hoy vemos que no les importa los esfuerzos por salvar a una especie animal, de mejorar nuestro entorno natural, de corregir el rumbo de un país.
- soledad. La tecnología aleja al individuo de los demás. La primera célula afectada es la familia. Vemos hoy familias comiendo juntos pero cada uno mentalmente en otro lugar. Esto evita la transmisión cultural y de ideas morales y éticas e dañan a la sociedad.
¿Cómo podemos nosotros ayudar a disminuir los riesgos que corren?
La respuesta es tan simple de verbalizar como compleja de llevar a cabo. Necesitamos caminar con ellos, guiarlos, platicar, enseñar, trabajar a su lado. No se trata de adjetivizar lo que hacen y lo que hicimos nosotros y sabemos, sino de darles puntos de comparación y de orientación. Es complejo porque implica un enorme esfuerzo de nuestra parte, de prepararnos conociendo más de la tecnología, de ellos, de los seres humanos. Se trata de que rompamos con los esquemas tradicionales de creer que los adultos no necesitan prepararse para comunicarse con los más jóvenes. Se trata de ayudarlos a sentirse cómodos para que nos escuchen, para que se sientan escuchados y así lograr vencer las diferencias naturales entre generaciones.
Esta reflexión fue 100% basada en experiencia personal.
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